Una chispa de la dulzura divina es suficiente para hacer que en la misma agonía de la muerte más cruel grites con Deleite: «La amargura de la muerte ha pasado.» La bondad de Todopoderoso le dispone a hacerlo. Su bondad pone en marcha un gran poder para que obre en favor de los santos que sufren. David ClarksonMuestra tus obras a tus siervos, tu